Con autoridad y sin derrotas, el equipo tiburón se mantiene en la cima del torneo
En la quinta jornada de la Liga BetPlay II-2025, Junior de Barranquilla volvió a hacer respetar su casa. En el estadio Metropolitano, los dirigidos por Alfredo Arias se impusieron con solidez 2-0 frente a Boyacá Chicó, en un partido que mostró no solo efectividad, sino también variantes ofensivas y buen ritmo de juego.
El visitante fue quien dio el primer aviso. Un potente remate de media distancia de Jairo Molina obligó al arquero Mauro Silveira a intervenir con una atajada de reflejos rápidos, desviando el balón al tiro de esquina y manteniendo el cero en el arco rojiblanco.
Sin embargo, la reacción de Junior no tardó. A los 9 minutos, el equipo costeño abrió el marcador con una jugada de velocidad y precisión: Jhon Fredy Salazar desbordó por la banda y sirvió un centro perfecto para que Yeison Suárez definiera de zurda desde el borde del área chica.
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Cambios oportunos y un cabezazo letal
Ya en el segundo tiempo, Junior siguió dominando el ritmo del partido. Con los cambios introducidos por Arias, el equipo ganó frescura y movilidad. Fruto de esa estrategia llegó el segundo gol al minuto 62, cuando Brayan Castrillón aprovechó un centro medido de Javier Báez y cabeceó con autoridad al fondo de la red.
El Metropolitano celebró una nueva victoria que consolida el proyecto de Alfredo Arias, quien parece haber encontrado una alineación equilibrada entre solidez defensiva y eficacia en el último tercio.
Invicto, firme y con mentalidad ganadora
Con este resultado, Junior suma 13 puntos en cinco fechas, producto de cuatro victorias y un empate. No conoce la derrota y se perfila como uno de los candidatos más serios al título en este segundo semestre del año. Además, esta fue su segunda victoria como local, ratificando al Metropolitano como una plaza difícil para cualquier rival.
Un equipo que madura partido a partido
Lo más destacable del Junior 2025 no es solo su invicto, sino la evolución táctica que está mostrando fecha tras fecha. La capacidad de modificar el juego con los cambios, mantener el equilibrio entre defensa y ataque, y la profundidad por las bandas han sido claves en este arranque.
Además, el respaldo en el arco por parte de Silveira y el buen momento de jugadores como Castrillón, Báez y Suárez le dan al técnico Arias una base sólida para seguir compitiendo al más alto nivel. El equipo no solo gana, lo hace con criterio y sin depender de individualidades, lo que habla de un trabajo colectivo bien ejecutado.
El reto estará en sostener esta intensidad y rendimiento cuando lleguen los rivales más exigentes y los partidos definitivos. Por ahora, Junior no solo suma puntos: suma confianza, identidad y ambición.
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